Si pudiera arrancarme las tripas, las entrañas, dártelas de comer con ensalada, con limón, sin nada de fuego o calor ¿necesitarías más representación? Acaso el perderme de mi misma ¿no fue el suficiente castigo impuesto? tengo que renunciar a mi unidad y origen como ser humano, debí perder más soportando y sufriendo este castigo, pero ahora eso no importa, lo que realmente importa es que esta tristeza que cargo y llevo por dentro, todo este desamor y desazón es más fuerte que las ganas de continuar, que hay algo tan denso en mi interior que prefiero arrancarme todo lo que tengo y dártelo, ojalá te lo llevaras, si al final te pertenece, casi tanto como todo este malestar, casi tanto como toda esta desventura, pero ¿qué voy a saber yo de merecimientos si nunca he merecido nada? Nunca he ganado y mi cuerpo es testigo y prueba, todos estos morados son la señal de una mayor pérdida y decepción ¿qué voy a saber yo de límites?
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