lunes, 26 de mayo de 2014

"Divagaciones #4"



Es inevitable no recordar todas esas cosas que te hicieron tan feliz un día, pero que precisamente un día se volvieron en tu contra y se incrustaron en tu espalda, pedacitos de reflejos rotos, de cartas vacías, todas esas cosas que te destruyen y te hacen peor persona, que te hacen ser más cruel a pesar de todo, de viajar aun en bus, de que hayan cosas que no cambian, las mismas rutas y caminos, los mismos tenis, solo que ahora están rotos, la misma sonrisa quebrada, los labios en forma de corazón, y esa mirada encantadora que te hizo trizas con su orgullo y sus mentiras.

Cada medio te hace más daño, y no importa lo que hagas para perdonarlo, no sirve de nada, te siguen llegando poemas tontos, el rencor sigue ahí, no eres capaz de sentir envidia, tampoco odias, es demasiado absurdo para querer lograrlo, quieres muchas cosas de vuelta, quieres tu risa, su risa, tus ganas de bailar, sus poemas más serios y sensatos, pero como siempre, sus promesas fueron rotas e incumplidas y no hay nada que puedas hacer para hacerle pagar, ni tomando, ni comiendo, ni durmiendo, a ninguna hora, en ningún día puedes desistir de la idea de sus abrazos, porque estas lo suficientemente perdido en un discurso moralista que te hace perder credibilidad e igual no te importa, solo quieres de vuelta esas pequeñas cosas que te hacían tan feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario